sábado, 30 de octubre de 2010

Cuando uno no corre con el tiempo

     Cuando uno no corre con el tiempo el tiempo lo corre a uno a patadas. No funciono con la mecánica Twitter: no bien vi que había escrito seis entradas en el mes, decidí parar el Cuaderno hasta noviembre. Pasaré unas semanas sin publicar, pensé, total nunca pasa nada digno de mención. Y ahí nomás viene el censo. Y ahí nomás muere Mariano Ferreyra. Y ahí nomás muere Kirchner. Es que es nomás que uno decide no escribir para que pasen todas las cosas del mundo.
     No quiero sumarme a la millonada de gente que escribe cartitas apretadas y lagrimeantes, pero es lo que sale, qué le voy a hacer. Soy de los que nacieron en el noventa —más o menos—, soy de los criados por Ménem: me acostumbré a que mi presidente sea un enemigo. Soy también un nene de segunda posición, no como el General, y aprendí a repudiar el neoperonismo. Este tipo Kirchner rompió muchos supuestos, cosas que yo daba por sentado, sobre todo las que acabo de nombrar. No me aperonizó, de la misma manera que no me hizo confiar de pronto en todos los presidentes. No me olvido de que la erradicación de las clases es más importante que la conciliación de clases, ni de que la participación de los trabajadores en las ganancias de una empresa es apenas la sombra de la sombra del respiro del recuerdo vago de la eliminación de la propiedad privada de los medios de producción. Pero tampoco creo en la Revolución de la noche a la mañana, y en medio de las posturas indefendibles, que las tuvo y a montones, se hizo el tiempo para merecerse uno que otro aplauso.
     No fue el Che ni Walsh ni Zapata ni San Martín ni Artigas, pero fue un hombre justo, a su manera, y yo aprendí a respetarlo. Tampoco quiero caretearla: su presidencia me resbaló soberanamente. Yo era muy chico —lo soy todavía— y si hay algo de kirchnerista en mí, es por Cristina y nació en el dos mil ocho. Pero el cuadro de Videla está donde está, en el mismo lugar que las leyes de impunidad, y eso no es meramente simbólico.
     Ah, y en otro orden de cosas, el otro día volví con mi novia. Y sí, estoy bastante contento al respecto. Nada más, hasta el mes que viene.

domingo, 17 de octubre de 2010

Fui al Maipo, soy re top y otras noticias

     ¡No puede ser la reputísima madre que los remil parió qué genial que estuvo! Fui ayer al teatro Maipo a ver Sweeney Todd, el cruel barbero de Fleet Street de Stephen Sondheim, y aunque compré las entradas más baratas no pude evitar sentirme un magnate. Pasa que no voy al teatro muy seguido.
     La obra es maravillosa, Karina K hace una Lovett digna de Angela Lansbury, la puesta en escena es hermosa, el espacio se aprovecha hasta la última gota, Julio Chávez es perfecto y si tiene defectos (que los tiene) yo desde acá se los perdono todos porque es Julio Chávez (digamos solamente que para George Hearn le falta, sobre todo le faltó bronca en Epifanía).
     Por supuesto que hay todas las pifiadas que pueden esperarse en la traducción de un musical del inglés al castellano. Por el bien de la métrica se dejaron en el inglés original cosas como ladies and gentlemen, naive y sir, y en El torneo cantada por Pirelli (Roberto Peloni) hubo muchas más palabras en italiano que en la versión anglosajona (ahora que lo pienso eso no estuvo tan mal). Pero así lo que se dice en general fue todo extraordinario, una barbarie los coros en el Prólogo (que siempre está tan bien, desde la segunda versión en Broadway, pasando por la versión en concierto y llegando a la versión española). Siendo los protagonistas Julio Chávez y Karina K, se me ocurre que alguien muy diferente a mí podría hacer una broma con Hugo Chávez y Cristina K.. Así que nada, se las dejo picando.
     Ah, y en otro orden de cosas, me separé de mi novia. Y sí, ando un poco triste al respecto. Pero pásense por su blog, que hasta puso un poema mío y todo.

domingo, 10 de octubre de 2010

¡Simultáneamente!

     No me gusta subir humoradas sectarias para la risa de pocos, pero pasa que desde ayer que no paro de enloquecer con el Loqueseaneitor3000. Ojalá se me pase. Mientras tanto, disfruten.

sábado, 9 de octubre de 2010

Solución para el bloqueo artístico

     En la comunidad WEE (de webcómics en español) ha surgido una de las grandes maravillas del siglo veintiuno: el Loqueseaneitor3000. Podría pasarme horas intentando explicar en qué consiste, o incluso podría decirles que lean esta explicación de su mismísimo creador (un tal Willy Galleta), pero la verdad es que no es tan complicado de explicar.
     Este aparato sublime, con sólo cliquear un botón llamado ¡Otro! nos proporciona de manera completamente aleatoria un sustantivo y un adjetivo. Si, por el contrario, recurrimos al botón titulado ¡Dos más!, la formidable máquina hará lo ya dicho pero con dos adjetivos en lugar de uno. Y tan sólo para darle más picante a la experiencia, algunos adjetivos no son adjetivos en lo absoluto, sino gerundios y hasta sintagmas enteros.
     Cuando la cabeza del artista se cansa, ahí está el Loqueseaneitor3000 para sugerir ideas frescas y originales. Se lo utiliza mayormente para hacer pequeños dibujos, pero me imagino que debe ser igual de útil para algún breve pedazo de literatura. Como la invensión es española y abunda en referencias pertenecientes al autodenominado friquismo (con perdón de la expresión), los que vivimos de este otro lado del mar podemos encontrar ciertas dificultades de comprensión, pero me imagino que cualquier hispanohablante alfabetizado encontrará una oración unimembre inteligible al tercer clic.

martes, 5 de octubre de 2010

Oriente y Occidente, un solo corazón

En abril del año pasado inventé a Beódocles (cuyo nombre es una pequeña subversión del presocrático Empédocles) para señalar algo sobre unas cosas que estaba estudiando en Pensamiento Científico. Lo tengo presente desde entonces y deseo utilizarlo para burlarme de muchas cosas referidas a la filosofía. Acá a la derecha tienen un lindo retrato.

Hace algunas semanas, jugando al Shadow Snake, tuve la ocasión de leer varias frases célebres de Confucio. (El juego no es destacable, lo traigo a colación por la mera fidelidad de mi crónica a los hechos.) Al ver su famosa "la gloria de un hombre no está en jamás caerse sino en levantarse cada vez que lo hace", descubrí que muchas de sus máximas suenan igual de verdaderas y sabias aún cuando uno las invierte para decir exactamente lo contrario de lo que originalmente querían decir. Surgió así Foncucio.

Entonces hoy mismo, y gracias a un lindo código que encontré por aquí, añadí a la barra lateral de este Cuaderno dos muy bonitos bloques de texto que dispensarán al azar verdaderas joyas gnómicas de ambos autores: un sabio oriental y un filósofo occidental, ambos de mi autoría. (No es que la palabra gnómicas sea la adecuada, sino que tenía que usarla para que pareciera que soy inteligente.)

lunes, 4 de octubre de 2010

¡Diseño nuevo y viva la pepa!

Pasa que, por diferentes razones, estuve viendo el nuevo editor de plantillas de Blogger y me agarraron ganas de pulir un poco el diseño de mi Cuaderno. A cualquiera le puede pasar, che, que lo bonito atrae. Díganme si no. Ah, y para nunca olvidarme de ese diseño viejo y tierno a la vez, saqué esto del caché de Google:

domingo, 3 de octubre de 2010

Rebelión en la zanja


¿Dónde cazzo se consigue la Rebelión en la granja de 1999? Me rehúso a creer que una película tan reciente sea a la vez tan inalcanzable. Acabo de leer el libro y quiero ver la película, ¿qué hay de malo con eso, mundo? ¿Por qué no me dejás ser feliz? Nada en contra de la versión animada de 1954, si a mí el cine viejo y el cine animado me encantan. Ayer vi El secreto de Kells, dicho sea de paso, y me fascinó. Mil y una veces cliqueé enlaces mentirosos con la imagen de la película que yo buscaba pero el video de la otra. De la calle a las casas de alquiler, me encontré con DVDs de la versión animada que se vendían con la portada de la versión más nueva.
Estoy cansado. Agoté las alternativas legítimas y oficiales; busqué en las zonas de legalidad dudosa; me sumergí en los antros más mugrientos de la piratería. Lo único que conseguí, vez tras vez, fue esto: